jueves, 29 de diciembre de 2011

10 consejos para tomar fotos profesionales

1. Basta de retrasos de obturación. Si su cámara presenta problemas de retraso de obturación, será mejor que pruebe el truco del pre-enfoque. Otra opción: muchas cámaras ofrecen una función de enfoque contínuo, que consume más batería, pero también disminuye el retraso de obturación al ir enfocando constantemente mientras encuadramos (o mientras el sujeto se desplaza).
Las cámaras más nuevas y caras tienden a sufrir menos retraso de obturación, y los modelos réflex digitales (es decir, las cámaras de unos 1.000 € con objetivos intercambiables) no presentan ningún retraso.
2. No se crea el mito de los megapíxels. Una mayor cantidad de megapíxels no hace que una cámara sea mejor.
Los megapíxels indican el tamaño máximo de cada foto. Por ejemplo, una cámara de cuatro megapíxels captura imágenes compuestas por cuatro millones de puntos diminutos. El problema es que los fabricantes de cámaras presumen de su cantidad de megapíxels como si fueran un indicador de la calidad fotográfica, y hay muchos consumidores que acaban picando.
En realidad, el número de megapíxels es un indicador del tamaño, pero no de la calidad. Hay fotos horribles de siete megapíxels, como también las hay espléndidas de sólo tres megapíxels. La calidad del objetivo y del sensor determinan mucho más los resultados fotográficos; es una lástima que no existan estadísticas fáciles de comparar sobre dichos atributos).
Entretanto, más megapíxels obligan a comprar una tarjeta de memoria más grande y cara para guardarlos. Y también a esperar mucho más: entre foto y foto, durante la transferencia al ordenador, y para abrir y editar las fotos.
Sólo hay dos situaciones en las que conviene tener en cuenta los megapíxels: cuando se quieren hacer ampliaciones de gran formato (por ejemplo, pósters de 50 x 75 cm) y cuando se desea contar con libertad para recortar gran parte de una foto para conservar el encuadre bueno de verdad, dejando aún los píxels suficientes para imprimir copias de tamaño razonable.
Pero si usted no va a editar sus fotos ni necesita ampliarlas mucho, no se deje llevar por la tendencia hacia los megapíxels. Un buen punto de equilibrio se encuentra en los 4 ó 5 megapíxels.
(Otro truco, éste de regalo: las fotos que se van a mirar en una pantalla, ya sea la web, el correo-e o un pase de diapositivas) no necesitan muchos píxels para nada. Probablemente, con dos megapíxels hay más que de sobra para llenar una pantalla de ordenador sin tener que abrir el zoom. Las grandes cantidades de megapíxels tienen que ver sobre todo con la impresión, que requiere una densidad de puntos mucho mayor).
3. Ignore el zoom digital. Otro de los argumentos que utilizan los fabricantes de cámaras para llegarnos a la cartera es presumir de dos factores de zoom distintos: el óptico (normalmente, 3 aumentos) y el digital (¡10 aumentos! ¡20 aumentos! ¡30 aumentos!).
El zoom digital no es más que una ampliación de la foto. No le aproxima a la acción ni capta más detalles; de hecho, los valores más elevados pueden llegar a estropear las fotos. Para obtener los mejores resultados, deje desactivado el zoom digital. Lo que importa es el número del zoom óptico, que es el del objetivo que le aproxima al sujeto.
4. Tire la tarjeta incluida. Por desgracia, es práctica habitual incluir con la cámara una tarjeta de memoria de muy poca capacidad: un cebo con el que podrá usted disparar un par de fotos mientras todavía está bajo el árbol de Navidad, pero que se llena con sólo cuatro o cinco fotos.
Por eso, al elegir cámara, hay que contar con el coste de una tarjeta de memoria de capacidad razonable, pongamos 512 MB.
5. Atención al formato. Hay una variedad inmensa de tamaños y formas de tarjetas de memoria. Los formatos más económicos son el Compact Flash (grande y robusto; la tarjeta de 1 GB cuesta unos 90 €, pero las hay de hasta 8 GB de capacidad) y el SD (unos 100 € por la tarjeta de 1 GB; el máximo son 2 GB).
La mayoría de las cámaras Olympus y Fuji necesitan tarjetas xD (unos 120 € la tarjeta de 1 GB, la de más capacidad), mientras que la mayoría de los modelos Sony utilizan el Memory Stick Pro (unos 160 € la tarjeta de 1 GB, hasta un máximo de 4 GB) o bien el Memory Stick Duo, de menor tamaño (unos 200 € la de 1 GB; el máximo son 2 GB).
Tenga en cuenta que hay ordenadores portátiles, de bolsillo, teléfonos móviles, consolas de videojuegos, impresoras, quioscos de impresión fotográfica y otros equipos provistos de ranuras para tarjetas de memoria. Lo más frecuente es que admitan tarjetas Compact Flash o SD. Las ranuras compatibles con Memory Stick son menos habituales, y las ranuras XD una rareza.
6. Investigue. Por fortuna para los compradores potenciales de cámaras, la web está repleta de sitios, como dcresource y dpreview, que prueban y analizan a fondo todos los modelos que se les ponen a tiro. Consúltelos antes de comprar; si tiene prisa, lea por lo menos la introducción y las conclusiones, y mire las fotografías de muestra.
7. Identifíquese. No se le ocurra preguntarle “¿Qué cámara digital me compro?” a un columnista de tecnología. Sería lo mismo que preguntar “¿Qué coche debo comprar?” o “¿Con quién tengo que casarme?” No existe una única respuesta correcta.
Ahora existen cámaras de diversas categorías, cada una con sus ventajas e inconvenientes. Hay tarjetocámaras tan pequeñas como una Visa y de sólo dos centímetros de grueso (llamativas y muy cómodas, pero con pocos controles manuales y poca duración de la batería); cámaras que caben en el bolsillo del abrigo (mayores que las anteriores, pero todavía compactas, con tapa de objetivo incorporada, batería de mayor duración y más funciones); modelos semiprofesionalescon zoom (ya no caben en el bolsillo, pero llevan objetivos con super-zoom); y modelos réflex (baterías de larga duración, sin retraso de obturación y unas fotos extraordinarias).
8. Apague el flash. El flash de una cámara digital típica tiene un alcance de menos de tres metros. En otras palabras, lo único que conseguirá con él en la obra de teatro de fin de curso es distraer a los actores.
9. Encienda el flash. Por otro lado, hay un buen truco para cuando el rostro de alguien queda en penumbra: encender manualmente el flash. El flash forzado o de relleno rescata de las sombras el rostro del sujeto y salva más de un retrato que de otro modo quedaría reducido a silueta. (En la mayoría de las cámaras, el flash se enciende y apaga pulsando el botón del relámpago).
10. Apague la pantalla. La pantalla trasera es, sin duda, una de las gracias de la fotografía digital, pero también la principal consumidora de la energía de la batería. Si no le molesta sujetar la cámara frente a los ojos y mirar por el visor óptico, apague la pantalla cuando haga fotos y duplicará la duración de cada recarga de batería.
Éstos son los 10 hábitos del fotógrafo digital eficaz. Verá cómo los saltos en trampolín vuelven a quedar bien encuadrados.

martes, 27 de diciembre de 2011

Como Realizar un Cortometraje.

¿Cómo Empezar a Realizar un Cortometraje?




Durante el rodaje del cortometraje "El Niño Azul"
Hacer un cortometraje no es cosa fácil, como toda producción de contenido demanda tiempo, sacrificio y más de un mal rato. Es un duro camino, muchas veces paradójicamente largo.

Hacer un cortometraje no es cosa fácil, como toda producción de contenido demanda tiempo, sacrificio y más de un mal rato. Es un duro camino, muchas veces paradójicamente largo, en el que las ilusiones, esfuerzos y creatividad están dedicados en su totalidad. Pero... ¿Qué pasos hay que seguir para hacer un corto? Las claves una buena idea en el papel y una buena concepción en la realización, además de contar con un plan presupuestario.
Partir de una idea: A partir de una idea, escribiremos un guión. Su duración no deberá ser mayor de 20 minutos, si bien es cierto que el metraje ideal para un cortometraje es de 15 minutos o menos. La idea no deberá ser excesivamente compleja, ni pretenciosa. Es mejor contar bien una historia sencilla que embarcarnos en una odisea dramática en 10 minutos, generalmente con un resultado lamentable. Por ello que es importante esta idea de partida: Un buen guión, una historia sencilla, y no de más de 20 minutos. La importancia de que el guión sea potente no es por otra cosa que con un buen guión podemos hacer un buen corto o un mal corto. Todo depende de cómo lo llevemos a cabo. Sin embargo, con un mal guión, siempre haremos un mal corto (Recordemos que lo mismo ocurre con los largometrajes y el audiovisual en todos sus géneros y formatos). A partir del guión literario (como si fuese una obra de teatro), realizaremos el guión técnico, en el que indicaremos los movimientos de cámara, el valor de plano, los ruidos de fondo, e incluso cuando entra la música incidental.Atención... Recursos disponibles: Una vez que hemos decidido la idea que queremos contar, hay que ver con qué medios contamos (económicos, técnicos y humanos). Por el lado económico, es cierto que se pueden hacer cortos prácticamente gratis. Sin que cuesten un peso con el actual avance tecnológico. Pero desde "cortometrajes" animamos a la gente que si se tiene que gastar algo, sea en comida para los amigos que van a participar en el corto. Por lo menos. Si el proyecto cobra mayor envergadura, entonces tendremos que elaborar un presupuesto, dedicando la partida a las que va destinada la inversión. Por ejemplo, esto no hará falta si hacemos un corto en video no profesional, donde apenas hay gasto. Pero si lo vamos a hacer en cine, ya tenemos el factor película, laboratorio, mezclas de sonido... Algunas de ellas nos pueden salir gratis o prácticamente gratis. Pero otras no, así que deberemos ir contabilizando el gasto que supondrá cada una de ellas. Actitud... Elección del equipo técnico y artístico: Una vez aprobado el presupuesto, escogeremos al equipo técnico y artístico. Haremos pruebas a actores de escuelas, o propondremos a actores famosos su colaboración en nuestro proyecto. Es primordial la buena elección del Director de Fotografía, ya que será la mano derecha del director, junto con el Ayudante de Dirección. También (aunque en los cortos de bajo presupuesto suele ejercerlo el propio director) conviene tener a una persona eficaz como Jefe de Producción, un productor ejecutivo capaz de solucionar cualquier problema con la mayor rapidez y acierto. Por otro lado, iremos escogiendo al equipo artístico: actores protagonistas, secundarios y figuración. Todos ellos deberán responder perfectamente al planteamiento del guión, y no conviene caer en el fallo tan común en los cortos de que los protagonistas suelen ser siempre jovencitos, ya que es lo más fácil para los jóvenes realizadores: engañar a los amigos para que salgan en su corto. Sin embargo, no hay que descartar la posibilidad de hacer casting en escuelas de interpretación, ya que los alumnos suelen ser de edades muy variopintas, y además están locos por hacer proyectos.Acción... El guión técnico y story board: La preproducción ya ha comenzado. A partir del guión literario que escribimos, ahora escribimos un guión técnico, es decir, desmenuzando cada plano del corto e indicando su valor de plano (Plano General, Plano Medio, Primer Plano...) Al mismo tiempo se debe elaborar un Story Board, con una viñeta para cada plano, en la que ya está determinado un encuadre, una composición, e, incluso, un diseño de los decorados. Esta tarea, aunque es minuciosa, ayudará enormemente a la hora de rodar, ahorrando mucho tiempo y dinero. Cada plano tendrá su propia viñeta, y vendrá indicado si hay algún movimiento de cámara (panorámica, travelling, paneo, etc...)Toma 1... El rodaje: Todo el mundo a sus puestos. Ya habremos realizado ensayos con los actores. El director de fotografía habrá probado con su equipo la cámara. El de sonido tendrá preparado el DAT. Ya no cabe lugar a las dudas. Todo debe estar listo para rodar. Seguiremos el orden que hayamos establecido en el plan de rodaje, según las localizaciones, campos de luz, disponibilidad de los actores, etc. Normalmente se tiende a rodar un número de horas enorme, no inferior a las 10 horas, por mero ahorro de recursos. Pues bien, tampoco conviene pasarse, ya que al tercer día el agotamiento se hará presente en todo el equipo. Un cortometraje, de unos 15 minutos tarda en rodarse unos tres días. A veces más y otras menos, todo depende de la complejidad del proyecto, número de localizaciones, si hay efectos especiales o no... En fin, que cada corto es un mundo.OK Queda... El montaje: Ya tenemos registrada la historia en tomas sueltas, bien sea cine o vídeo. Ahora hay que darles sentido, y además habrá que sincronizar el sonido. Si es en cine, lo haremos en AVID, para posteriormente dar al laboratorio las listas de EDL para que corten y empalmen el negativo. Si es en vídeo, pues el montaje es más rápido, ya que inmediatamente podremos observar el resultado final en la propia mesa de edición.El acabado: Una vez finalizado el corto, es muy común el hacer varias copias en vídeo para su distribución en festivales como FESANCOR. Es bueno el diseñar una carátula, e incluso un afiche, con el fin de que la promoción sea eficaz y el corto atraiga al público. Estas cosas que parecen ser simples voladores de luces, son los detalles que pueden motivar a un espectador a llegar a la sala. También se suele hacer un press book, es decir, un folleto en el que se enumera el equipo técnico y artístico, el argumento y se incluyen fotos del rodaje para poder comunicar en medios especializados como Revista ONOFF o los masivos si es que te toman en cuenta.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Consejos Para Vestir Hombres.

CONSEJOS PARA VESTIR HOMBRES

El traje es el rey por excelencia, para el hombre. La chaqueta (americana) deberá ajustar perfectamente en los hombros, y la caída debería distar al menos cerca de un palmo de las rodillas. Es decir, cubrir los bolsillos del pantalón, aproximadamente.
Las mangas, con los brazos rectos, deberán llegar hasta las muñecas, y con los brazos doblados, tendrían que dejar ver los puños de la camisa (y así poder lucir los gemelos o los cubrebotones). La caída posterior de la misma deberá cubrir el asiento del pantalón.

El pantalón deberá quedar a la altura del tacón del zapato. Ni quedará corto, viéndose los calcetines, ni arrastrará por el suelo (tres dedos al menos por encima de la altura del suelo).

No debemos dejarnos llevar por las modas, que a veces imponen determinados largos en los pantalones que son poco estéticos.Las chaquetas cruzadas son más clásicas y se pasan menos de moda que las rectas.

También son más "formales" que las rectas. La chaqueta cruzada se viste abrochando, generalmente, todos los botones (o al menos dos botones).

La chaqueta recta se viste abrochando solo el botón superior, o los dos superiores, dependiendo del número de botones. En caso de no abrocharla al completo, siempre deben dejarse sin abrochar los botones inferiores.Si la chaqueta nos está un poco justa, cosa que suele ocurrir cuando tardamos en ponerla y hemos cambiado de talla, lo mejor es que no se abroche.

Queda muy feo esas tiranteces que se notan cuando la chaqueta nos aprieta y nos la abotonamos. Las solapas y hechuras suelen variar con la moda, aunque todas mantienen un estilo muy similar. Los mejores tejidos para los trajes de caballero son la lana, la franela, el lino, algodón o la alpaca (hay otras composiciones y mezclas).

En cuanto al dibujo puede ser pata de gallo, gales, etc. Depende del gusto de la persona.Respecto de las camisas los tejidos más utilizados son algodón y seda (aunque las mezclas con sintéticos son muy utilizadas). Los calcetines deberán combinar con los zapatos y/o los pantalones, y serán, según el resto de prendas, oscuros.

El cinturón deberá combinar con los zapatos. Aunque vista de sport, no desabroche más de un botón de su camisa. No es nada estético ver su pecho, por muy esbelto que sea usted ( y no digamos si usted es de abundante pelo en el pecho).Evite combinar cuadros con rayas, y no mezcle más de tres colores a la vez. Lo mismo ocurre con las corbatas, evite combinar corbatas estampadas con camisas estampadas, o rayas en la corbata y en la camisa.Para vestir un traje, los complementos utilizados serán unos gemelos o cubre-botones y un alfiler de corbata. Anillos, los mínimos (una alianza y/o un solitario).Y recuerde se ponga lo que se ponga, mantenga el buen gusto, sin perder su propio estilo personal.


El hombre elegante. Etiqueta en el vestir. La camisa.

La camisa es una de las prendas más utilizadas por los caballeros, tanto en atuendos formales, como informales o de sport. Pero no todas las camisas son iguales o se visten de la misma manera.

1. El cuello de la camisa deberá ser acorde a la prenda que vista, y a la corbata, si la utiliza, que vaya a lucir. Salvo determinadas modas, los cuellos con botones no deben ser utilizados para lucir corbata, son pocos elegantes. Tampoco los que llevan un pequeño pasador. Los cuellos amplios son apropiados para lucir nudos de corbata anchos. Así como los estrechos son utilizados para nudos de corbata pequeños o estrechitos. Uno de los más elegantes, según los expertos, es el cuello italiano (también conocido como cuello cutaway o spread).

Los cuellos de la camisa deben estar bien planchados y, si es posible, ligeramente rígidos (en épocas pasadas eran almidonados para obtener esta rigidez). Las medidas del cuello de la camisa deben ser exactas para evitar que quede demasiado holgado o que apriete demasiado siendo realmente incómodo llevar una camisa abotonada en su totalidad. Si lo desea puede ampliar información sobre las camisas en nuestro artículo "Tipos de camisa y como utilizarla".

2. En la parte delantera, amén del diseño elegido, la camisa debe llevarse abotonada en su totalidad, a excepción del último botón del cuello, que puede no abotonarse cuando se prescinde de la corbata, en camisas de sport y en camisas de manga corta. No obstante, como en tantos otros supuestos, la moda es bastante influyente en estos puntos.

Las abotonaduras pueden ser de vestir, botones normales de nácar o cualquier otro material natural o sintético, o bien pueden ser de "fantasía" para el vestuario de etiqueta, principalmente. Estas abotonaduras de lujo suelen ser pequeñas perlas, brillantes, etc.

3. Los puños. Dependiendo del uso que vaya a dar a una camisa se puede decantar por un tipo u otro de puño. Para las camisas de vestir puede valer simplemente con el puño normal, y para el vestuario de etiqueta el puño doble para gemelos. Ahora también hay camisas de puño mixto que pueden servir tanto para lucir botones y cubrebotones, como para lucir gemelos, escondiendo el botón en un ojal que llevan estos puños para tal fin.
Los puños deben ir siempre abotonados, tanto si se lucen complementos en ellos, como si no se lleva nada. Los puños generalmente abotonados, salvo algunas tendencias que imponen con cierta periodicidad los puños desabotonados e incluso doblados sobre la manga de la chaqueta.

4. El tejido. Las camisas más utilizadas son las de algodón, aunque pueden ser de muchos otros tipo de tejido. De seda, de lino, de mezcla con fibras sintéticas, etc. Dependiendo de la época del año y del vestuario que luzca, deberá elegir la más adecuada para cada momento y ocasión.

5. Modelos. Hay tantos modelos de camisa como fabricantes y diseñadores en el mundo. Cada casa o fabricante tiene sus distintos patrones para la fabricación de esta prenda. Las camisas de vestir, por ejemplo, no suelen llevar bolsillo alguno, así como las de sport o de vestuario informal si que suelen llevarlo, a su lado izquierdo


Etiqueta masculina. Los zapatos. Como vestirlos y combinarlos.

Los zapatos son una parte esencial del vestuario tanto masculino como femenino, aunque aqui nos fijaremos en el vestuario masculino.

Los de cordones, desde siempre, son los más utilizados y, en muchos casos, los que mejor combinan con el tipo de vestuario clásico y de etiqueta. No obstante, los nuevos diseños de zapatos, como los de hebilla y otros modelos similares han dado al traste con la hegemonía de los zapatos de cordones, pudiendo ver este tipo de calzado de forma habitual combinado con traje y vestuario formal.

En cuanto a los colores, los de color oscuro suelen ser los que mejor combinan con el vestuario formal y son, podemos decir, casi obligatorios para lucir con el vestuario de etiqueta. En determinado tipo de vestuario, se utilizan cierto tipo de zapatos muy definidos, como por ejemplo para el smoking los zapatos de charol, negros y de cordones. También ha cambiado el uso y se pueden ver distintos tipos y modelos de zapatos con el vestuario de etiqueta.Los zapatos deben de lucir siempre limpios, en buen estado de conservación, tanto los zapatos como los cordones y, en la medida de lo posible, deben limpiarse todos los días o al menos cuando sea necesario para estar en perfecto estado de


conservación. Es recomendable utilizar hormas siempre que recoja sus zapatos para evitar que éstos se deformen y conserven su forma. También, cuando las hormas son de madera, ayudan a controlar y absorber cualquier tipo de posible humedad de la piel del zapato.

El calzado es muy importante, pues diversos estudios sociológicos han demostrado que muchas personas en lo primero que se fijan, o una de las primeras cosas en la que ponen su atención es en el calzado de la otra persona. Por eso es muy importante causar una buena impresión.

Los zapatos, sobre todo los de vestir, deben ser finos, de piel y de suela delgada; si además son cosidos a mano, mucho mejor en cuanto a calidad y duración. Actualmente la moda está "imponiendo" zapatos de suela muy ancha, que son menos elegantes para vestir.

Para combinar de forma correcta un zapato, es adecuado que haga juego (combine) con el cinturón; en la medida de lo posible, hay que procurar que los calcetines tampoco desentonen con los zapatos. Los colores oscuros de calcetines suelen ir bien con casi todos los colores de zapato.

Los zapatos mocasines, naúticos y otros modelos similares no se utilizan para vestir de traje o de etiqueta. De igual manera, que no es nada elegante el uso de botas o botines cortos, sandalias y cualquier tipo de calzado no clásico con este tipo de vestuario. Ni que decir tiene, que el calzado deportivo solo se utiliza para hacer deporte o vestir de sport en zonas deportivas o de recreo.


Ropero basico. Que prendas debe tener un hombre en su armario.


El vestuario básico masculino debería contar con dos trajes de corte clásico, uno de ellos oscuro, válido para la mayor parte de ocasiones. Media docena de corbatas, (alguna de ellas de seda) que combinen bien con los trajes y las camisas; corbatas lisas y alguna puede ser estampada.

Al menos dos chaquetas de corte moderno, para vestir en ocasiones menos formales y que combinen con los pantalones y las camisas o polos. Dos o tres pantalones, al menos uno de ellos de vestir, para combinar. Media docena de camisas de vestir (con cuello sin botones, ojal de gemelos o doble ojal: botón y gemelos y por supuesto de manga larga) a ser posible lisas y de colores claros que combinan mejor con cualquier prenda.

Nunca debería llevarse corbata con camisas de manga corta. También alguna camisa más informal, para vestir de sport (pueden ser de manga corta y con botones en el cuello).

Opcionalmente, se puede tener algún polo, para combinar con los pantalones de sport, muy utilizados para visitas a casas de campo y encuentros informales. Hay que descartar, cualquier tipo de polo con publicidad, en la medida de lo posible, muy utilizados en la actualidad. Los polos pueden ser de manga corta o larga, dependiendo del clima al que vayamos.

La ropa de sport, también combina con camisas de manga larga, remangadas, con cuadros o rayas, aunque también pueden ser lisas, así como camisas de manga corta (pero que solo deberían ser utilizadas para este fin, y no vestirlas con chaquetas).

Varios pares de calcetines preferiblemente oscuros y de hilo o seda; dos o tres pares de zapatos, al menos uno de ellos de vestir, con cordones; algún jersey para vestir de una manera más informal, cuando vamos de sport; respecto de la ropa interior, camisetas y calzoncillos, al menos deberemos contar con una docena de mudas (una muda para cada día de la semana como mínimo). Desde luego que el ropero básico deberá contar con otros muchos elementos: cinturones, chalecos, pañuelos, etc. así como algunos complementos básicos como gemelos y alfiler de corbata.

Pero no solo vale con tener un buen ropero hay que saber combinar las prendas para que el mismo sea de utilidad. Vestir correctamente es un aprendizaje personal que debemos perfeccionar con el paso del tiempo. Y si no estamos muy puestos, lo mejor es pedir consejo, para evitar desaprovechar nuestro ropero e ir mal vestidos.

Lo mismo ocurre a la hora de comprar ropa. Deberemos tener muy en cuenta el tipo de ropero que tenemos, para poderle sacar más partido a las prendas que tenemos. de ropero que tenemos, para poderle sacar más partido a las prendas que tenemos. Y tener en cuenta el tipo de vida social que tenemos. No sería muy rentable comprarnos camisas de flores tipo o grandes estampados, si apenas vamos al campo o a sitios de playa.


Vestuario masculino. Como debe vestir el hombre.



El vestuario es un elemento muy importante a la hora de causar una buena impresión. Cuando nos presentamos en un sitio, en lo primero que se fijan es en nuestra apariencia externa.

Aunque los verdaderos valores de una persona no sean su vestuario, hay que causar una buena primera impresión. Saber estar no consiste solamente en ser educado , sino en un conjunto de factores entre los que ocupa un lugar muy importante nuestra apariencia, como nos vestimos.Se vaya o no a la moda, no debemos perder una elegancia natural al vestir, acorde a nuestra personalidad.

El vestuario básico de un caballero debe incluir un conjunto de prendas básicas que nos ayuden a cubrir la mayoría de los compromisos que se nos puedan presentar, tanto en el ámbito familiar, como en el social y laboral.Podemos citar como excepción, los trajes de etiqueta que por su escasa utilización (a no ser que sea una persona con un alto grado de vida social) puede optarse por el alquiler en vez de comprarlos.

A parte de nuestra apariencia física, con la que nacemos, podemos mejorar nuestra figura y nuestro aspecto con un adecuado vestuario. Ahora bien, manteniendo siempre nuestro propio estilo. Moda y elegancia, no es lo mismo, aunque tampoco tienen porque ser conceptos antagónicos. No todas las prendas de moda son elegantes o nos pueden sentar bien.

No cabe duda, que las posibilidades económicas facilitan nuestra labor de encontrar un vestuario adecuado para cada ocasión, al contar con una mayor gama de prendas a elegir, en cuanto a calidad y variedad de diseño. Pero, con poco presupuesto también se pueden hacer buenas combinaciones.

Saber coordinar y combinar con acierto no es una cuestión de dinero, sino de gusto. Con un ropero básico podemos crear múltiples combinaciones que nos pueden servir para diversas ocasiones.Las prendas de vestir han dejado de ser una mera protección del pudor y de los elementos climáticos (frío, calor, lluvia, nieve ...) para pasar a ser, en cierta medida, una forma de distinción social, una "marca" de nuestra situación socioeconómica. Pero no debemos olvidar el refrán: "Las apariencias engañan".A toda buena apariencia, deben acompañar unos buenos modales. De nada vale la "calidad" de la ropa, si no va acompañada de calidad humana.

A la hora de vestirnos debemos mantener un estilo propio y una gran naturalidad. Saber armonizar prendas de moda, con nuestra propia personalidad, o combinar piezas del ropero antiguas con otras actuales, es una tarea que debemos asumir. Y no debemos olvidar que la moda se pasa, el estilo propio y la elegancia no.